Durante esta crisis, algunas voces han alertado de que por primera vez, los jóvenes vivirán peor que sus padres. Se habla también de la generación perdida, aquella que busca empleo tras sus estudios y no lo encuentran. Pero, ¿qué ocurrirá con los que ahora nacen o están en el colegio? ¿Cómo serán laboralmente?
A estos niños se les conoce como la generación Z o net (nacidos a partir de 2001, con internet ya generalizado). Son nativos digitales, acostumbrados a la inmediatez que ofrece la tecnología, sus medios de comunicación son las redes sociales, aunque “no logran desarrollar competencias como la expresión verbal, la escucha activa o la asertividad”. Así les define el informe Trabajar en 2033, de la consultora PwC, que recoge previsiones sobre cómo será el mercado laboral en España en 20 años. “Se adaptan a la filosofía de trabajar para vivir. Su prioridad no será únicamente el trabajo, sino que buscarán divertirse, disfrutar y tener varios proyectos a la vez”, se añade. “Por ello, los planes de carrera deberán ser el medio para atraerlos, retenerlos y motivarlos”.
Por eso, los expertos creen que predominará la modalidad laboral independiente o freelance, sin comprometerse definitivamente con ninguna organización. De esta manera, los pertenecientes a la generación Z podrán dedicarse a diversas actividades económicas simultáneamente y, si perdieran una fuente de ingresos, aún tendrían otras.
Convivirán en las empresas con la generación X (entre 1965 y 1983), que representarán en 20 años el 34% de la población activa, de visión más internacional que sus predecesores, y también con los millennials (1984 y 2000), nacidos en época de abundancia. Se caracterizan por ser individualistas, confiados, creativos, decididos e inquisitivos, además de ser los más solidarios y preocupados por el medio ambiente. En el momento de elegir una empresa, los jóvenes de hoy priman las oportunidades que puedan tener en su carrera profesional (74,8%), la formación, la remuneración y el ambiente de trabajo, según la encuesta Formación y acceso al mercado de trabajo.
Priman los resultados
Para muchos, además, primarán los “resultados, donde la jerarquía no es un valor clave”, opina Alberto Tornero, director de emprendimiento de PwC. “Esto está motivando el surgimiento de un grupo de profesionales que tiene una percepción de su proyecto personal y profesional ligado a sus gustos y preferencias, que busca desarrollarlas en su trabajo, siendo por tanto protagonista de su carrera”, añade. A dichos prodesionales no les importa ir por libre, mediante sus propios proyectos empresariales. Esta es una de las fotografías con la que vivirán las organizaciones.
Asimismo, se espera que los profesionales cambien más a menudo de carrera y de empleador. Incluso algunos trabajarán para varias compañías, desarrollando proyectos específicos. Es la forma en que las pymes podrán acceder a profesionales técnicos muy especializados De hecho, el estudio recalca que serán necesarios 1,7 millones de nuevos empleos en profesiones técnicas.