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A menudo tendemos a pensar que, si una botella es más grande y lleva más agua, el gasto de plástico es equivalente, sin embargo, esto no funciona así. Si se desviasen una parte de las ventas de bebidas de botellas de plástico pequeñas a medianas podría reducirse notablemente la producción de desechos de tereftalato de polietileno (PET), según un estudio publicado en Scientific Reports . Los residuos plásticos son de particular importancia porque las tasas de reciclaje y reutilización son bajas y el material es duradero, lo que permite que los residuos plásticos mal gestionados se acumulen en el medio ambiente. Los envases de plástico desechados liberan sólidos tóxicos que contaminan el agua y el suelo, generan emisiones nocivas que contaminan el aire y producen basura generalizada que amenaza la vida y la salud de las plantas, los animales y los seres humanos.

El PET es el material predominante utilizado en las botellas de plástico que contienen bebidas no alcohólicas. Rafael Becerril-Arreola y Randolph Bucklin pesaron 187 botellas de PET de diferentes tamaños distribuidas por las marcas de bebidas más vendidas en Minnesota, EE. UU., para identificar qué tamaños de botellas eran los más eficientes para entregar el mayor volumen de bebida con el menor peso de empaque. Para validar sus hallazgos, los investigadores combinaron datos sobre las ventas de botellas de PET de diferentes tamaños y el peso de los desechos de PET en Minnesota de 2009 a 2013. Estos datos se utilizaron para estimar el efecto que los cambios en las ventas de ciertos tamaños de botellas de PET podrían tener en residuos de PET.

Los autores encontraron que las botellas de tamaño mediano entregaban el mayor volumen de bebida con el menor peso de empaque, en comparación con las botellas pequeñas y grandes. La capacidad de botella más eficiente fue de aproximadamente 2.265 mililitros. Cuando la proporción de botellas de PET de tamaño mediano vendidas era relativamente alta, el peso de los desechos de PET era menor. Al simular los efectos de un cambio del 20% en las ventas de botellas de PET pequeñas a medianas, los autores estiman que la cantidad de PET utilizada podría reducirse en un 1% cada año. Los hallazgos indican que alentar a los consumidores a cambiar de bebidas de capacidad pequeña a mediana podría ayudar a reducir los desechos plásticos en más de 9.000 toneladas por año, solo en los Estados Unidos. 

Los autores del estudio han recopilado las distintas razones que empujan a los compradores a elegir un tamaño u otro: los consumidores sensibles al precio prefieren bebidas grandes porque el precio por litro es generalmente más bajo. Por el contrario, los consumidores orientados a la salud a menudo sustituyen bebidas grandes por bebidas pequeñas en el hogar porque estas últimas facilitan el consumo de porciones pequeñas.

Por último, añaden varias posibles soluciones, para mejorar la forma en la que consumimos estos envases: añadir a las botellas escalas impresas para ayudar a fraccionar su contenido o alentar a los consumidores preocupados por el medio ambiente que prefieren envases reciclados y opciones más respetuosas a cambiar a botellas de capacidad media si en la etiqueta se indica la eficiencia de la botella.